Se ha observado que algunos cráneos fueron enyesados y pintados con nuevas facciones como si estuvieran tratando de darles una nueva identidad. Varias capas de enyesado y pintura demuestran que habían quitado los cráneos para
usarlos en rituales múltiples.Por otra parte, los expertos han remarcado que algunos de los huesos humanos habían sido movidos de su lugar original y situados en posiciones diferentes creando nuevos diseños. Esta práctica se ha evaluado como un gesto simbólico para preservar y recordar la historia de la morada y de la colonia. Este concepto es definido como “culto patriarcal”.

No hay comentarios:
Publicar un comentario